Mi Vallenato preferido es éste. Hasta hoy no he podido dar con él porque tan solo lo oí en una “picada” de carretera almorzando sopita guajira con altavoces de discotecadifundiendo notas a todo trapo y un gallo de cresta enhiesta cantando con Silvestre en los quejidos más agudos de la canción “tú eres mi razón de ser” kikirikiii “te fui a dar un besito y me dijiste no” kikirikiiii, “como quieres que yo no busque la verdad” Kirikiii, “y el mundo estalló” ¡ ki kikiri kiiiirikiiii!
Los vallenatos me parece que cumplen una labor pedagógica (se puede enseñar cualquier cosa si se repite a todas horas) y reflejan toda una antropología, la de la zona caribeña colombiana.
Este sería según Husserl el conocimiento natural, que empieza en la experiencia y permanece dentro de la experiencia: es el mundo ¡pues qué bien! ¡me quedo!
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